Luz y oscuridad en el D.F.
“Más que por la fuerza, nos dominan por el engaño"
Simón Bolívar
Simón Bolívar
A más de un año de distancia, una torre luminosa con dos columnas de cuarzo, separadas por la nada y el acero que se enciende, permitiendo a los capitalinos vislumbrar la terrible corrupción e impunidad del manejo de los recursos del erario público.
Un homenaje a los mexicanos de hoy, a los héroes que en los últimos dos siglos han forjado esta gran nación; fueron las palabras del entonces presidente de México, Felipe Calderón, al inaugurar la “Estela de Luz”, que titulo personal yo llamaría un “gran elefante blanco”, cuyo costo final fue de 1.035 millones de pesos, más que el objetivo principal de conmemorar el Bicentenario de nuestra tan reconocida Independencia, nos recuerda el gasto innecesario que genera el mantenimiento y el excesivo consumo de energía.
En contraste, existen en
Tal es el caso del Hotel Regis, el cual consta de helipuerto, residencias, spa, boutiques, gimnasio, bar y áreas de trabajo con acabados de lujo en los 32 de sus pisos; y por increíble que parezca la construcción se llevo a cabo con un costo similar al de la “Estela de Luz”.
Lo que da como resultado que un recurso bien empleado en innovación de infraestructura tiene como resultado beneficios que nos ayudan a eficientar el recurso trayendo consigo beneficios a los capitalinos.
Twitter: @jorgegavino
(Publicado el día 25 de octubre del 2013 en La Crónica de Hoy)
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