TURISTAS EN ACAPULCO
Jorge Gaviño
Ambriz
"El que guarda silencio
no declara contra sí mismo."
Aldous Huxley.
La
madrugada del martes, un grupo de cinco sujetos armados, con el rostro
cubierto, entraron a un bungalow
localizado en Playa Encantada, sobre la carretera los Amates-Barra Vieja, en la
zona oriente de Acapulco, Guerrero. Ahí vacacionaban 14 personas, siete hombres
y siete mujeres, seis de ellas de nacionalidad española.
Los
ladrones ataron con cables de teléfono, de lámparas y cordeles de trajes de
baño a los hombres ahí presentes y a una mujer de nacionalidad mexicana, a la
par que abusaban sexualmente de las seis turistas españolas.
Aunque
el ataque ocurrió alrededor de las 02:30 de la madrugada, las víctimas lograron
llamar a las autoridades aproximadamente a las 6:56 am, pero la policía tardó
más de una hora en llegar al lugar de los hechos.
Los
primeros datos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), dieron
a conocer que a las 4:30 de la madrugada los ladrones huyeron llevándose: dos
laptops, tres cámaras fotográficas, dos tabletas, 16 celulares, reproductores
de MP3, carteras, tarjetas de crédito, $8,800 en efectivo pero sobre todo algo
irreparable: la integridad física y psicológica de las extranjeras.
En
conferencia de prensa, el alcalde de Acapulco, Luis Walton Aburto y la
Procuradora General de Justicia del Estado, Martha Elva Garzón Bernal, dieron a
conocer esta desafortunada situación, dijo que hasta el momento no hay retrato
hablado de los delincuentes, evidencia que los ligue al crimen organizado, ni
detenidos, únicamente hay siete
sospechosos, que tienen entre 20 y 30 años, a quienes se prevé arrestar.
Walton
Aburto, se remitió a decir que la casa donde ocurrieron los acontecimientos “es
parte de la oferta extra-hotelera de Acapulco” y que es una de las “desventajas
de este tipo de estancias”. Admitió que Playa Encantada está alejada del centro
de la ciudad y carece de seguridad; en comparación con la zona costera de
Miguel Alemán, el área más turística de Acapulco y la más segura.
Peor
aún, minimizó los acontecimientos al manifestar: “pero esto sucede en cualquier
parte de Acapulco o en México”; buscando así justificar la incapacidad del
gobierno que lidera para brindar seguridad no sólo a sus ciudadanos, sino a los
turistas, e ignorando las consecuencias que esta situación podría traer para el
turismo nacional e internacional.
La
última Encuesta Nacional de Vivienda realizada por Consulta Mitofsky y
publicada en Febrero del 2011, dio a conocer que Acapulco ocupa el segundo
lugar de los sitios preferidos por el turismo nacional y extranjero, para
vacacionar y divertirse.
Sin embargo, después del ataque a estas seis mujeres, el gobierno español
descartó modificar las recomendaciones que hace a sus ciudadanos para viajar a
México, en el caso particular de Acapulco, calificó a esta ciudad como una “zona
de riesgo a evitar”.
Acontecimientos como estos, afectan aún más la imagen bastante desgastada
de México, acrecientan la falta de confianza de los ciudadanos en sus
autoridades y en las instituciones; a nivel mundial, somos sinónimo de
inseguridad, violencia, corrupción y narcotráfico. Por lo que hago un llamado a
las autoridades acapulqueñas para que este delito no quede impune, para que garanticen
la seguridad que sus ciudadanos necesitan y tanto Acapulco como su oferta
turística no decaigan.
Twitter: @jorgegavino
(Publicado en el Sol de México el Lunes 11 de Febrero de 2013)
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