20/10/25

UNAM e IMSS alianza por la salud mental juvenil

 UNAM e IMSS alianza por la salud mental juvenil


«La salud mental no es un destino, sino un proceso. Es algo en lo que tienes que trabajar constantemente.»

Noah Shpancer

En México, la salud mental de los jóvenes se ha convertido en una de las principales preocupaciones del sistema de salud pública. Las cifras son alarmantes: el 50% de los trastornos mentales comienzan antes de los 14 años, y el 75% se manifiestan antes de los 24 años. De acuerdo con estudios recientes, un 31.1% de los adolescentes en el país presentan algún síntoma depresivo, mientras que el 7.1% enfrenta dos o más síntomas. Estos datos revelan una problemática creciente que afecta a millones de jóvenes mexicanos, cuya salud emocional no solo se ve amenazada por la presión académica, sino también por factores sociales y económicos como la violencia, la pobreza y la falta de oportunidades. El suicidio es la tercera causa de muerte en jóvenes de 15 a 29 años en México, y las tasas han aumentado un 114% en los últimos años, especialmente entre aquellos que enfrentan problemas emocionales derivados de las presiones escolares y sociales. Ante este panorama, la intervención temprana y la prevención son esenciales para abordar de manera efectiva los trastornos mentales en los jóvenes. En este contexto, el día de ayer se suscribió un convenio entre el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuyo objetivo es crear un modelo de colaboración para la atención y prevención de los trastornos emocionales dentro de la comunidad educativa.

En la ceremonia de firma del convenio, Zoé Robledo, director del IMSS, destacó: “El bienestar de nuestros jóvenes es responsabilidad de todos, no basta con ofrecer servicios de salud mental cuando los jóvenes ya están en crisis; es necesario crear un sistema que les permita prevenir, identificar y gestionar sus emociones desde una edad temprana”. Dicho convenio entre el IMSS y la UNAM no solo busca dar acceso a servicios de salud mental, sino que tiene un enfoque preventivo clave para enfrentar los problemas emocionales de los estudiantes antes de que se agraven. La colaboración entre estas dos instituciones pone en marcha

un plan de acción integral, que tiene como objetivo general mejorar las capacidades de afrontamiento de la comunidad educativa. El primer eje del plan se enfoca en fortalecer las capacidades de autocuidado y eliminar el estigma que históricamente ha acompañado a los problemas de salud mental. A menudo, los estudiantes sienten miedo o vergüenza de buscar ayuda por temor a ser juzgados. El plan propone derribar estos tabúes, promoviendo una cultura de autocuidado, apoyo mutuo y dejar de estigmatizar los trastornos emocionales. La salud mental debe ser vista como una prioridad dentro de la educación, de la misma forma que la salud física.

El segundo objetivo se dirige a fortalecer los factores protectores que pueden ayudar a los jóvenes a prevenir los trastornos mentales. Esto incluye promover hábitos saludables como una alimentación adecuada, ejercicio regular, descanso suficiente, relaciones sociales positivas y la gestión de emociones de forma efectiva. El tercer eje se refiere a la identificación temprana y la atención de factores de riesgo, lo que se llevará a cabo mediante un tamizaje continuo y estrategias de acompañamiento psicológico y psiquiátrico. Detectar los problemas emocionales en fases tempranas puede marcar la diferencia entre la intervención eficaz y el agravamiento de la situación.

El cuarto y último objetivo es promover una atención oportuna y eficaz para los problemas de salud mental. Este objetivo implica crear una red de apoyo dentro de las instituciones educativas que sea accesible, eficiente y libre de barreras burocráticas. Los estudiantes deben poder acceder rápidamente a servicios de salud mental sin enfrentarse a listas de espera o procesos complicados.

La importancia de este enfoque preventivo resalta aún más en el contexto de la pandemia de COVID-19, que exacerbó las dificultades emocionales de millones de jóvenes. El aislamiento social, el cambio a la educación en línea y la incertidumbre sobre el futuro afectaron negativamente la salud mental de los estudiantes, dejándolos más vulnerables a trastornos como la ansiedad, la depresión y el estrés. El regreso a clases presenciales ha sido un desafío para muchos, y el impacto de la pandemia en la salud emocional de los jóvenes es algo que se debe abordar con urgencia. La implementación de este plan de acción en salud mental, auspiciado por el IMSS y la UNAM, tiene el potencial de cambiar

radicalmente el panorama educativo en México. Este enfoque innovador no se limita a la intervención cuando los jóvenes ya enfrentan una crisis, sino que promueve un modelo preventivo que se adapta a las realidades de los estudiantes mexicanos. Un ejemplo de este enfoque preventivo es la incorporación de la terapia dialéctica conductual (DBT), que ha demostrado ser eficaz en la reducción de conductas suicidas y en el fortalecimiento de la salud emocional en entornos escolares vulnerables. Con este acuerdo se pretende transformar la manera en que las instituciones educativas abordan la salud mental de los jóvenes.


Publicado en El Universal, 16 de octubre 2025.

Los Nobel 2025: ciencia, imaginación y el poder de lo colectivo

 

Los Nobel 2025: ciencia, imaginación y el poder de lo colectivo




“El Nobel no premia a personas, premia ideas que cambian al mundo.” — M. Curie

Desde su creación hace más de un siglo por Alfred Nobel, el Premio Nobel ha sido mucho más que un simple galardón: se ha transformado en un reflejo simbólico del contexto político, científico y cultural de cada época.

A lo largo de su historia, más de 900 personas y organizaciones han sido reconocidas en distintas disciplinas. Figuras como Marie Curie obtuvieron dos Nobel en áreas diferentes, mientras que otras, como Rosalind Franklin o Mahatma Gandhi, quedaron fuera del reconocimiento por razones institucionales o políticas. Incluso Albert Einstein fue premiado por un hallazgo menor en comparación con su Teoría de la Relatividad.

Los galardones de este año resultan particularmente interesantes. En Física, fueron otorgados a John Clarke, Michel Devoret y John Martinis, quienes lograron algo que parecía imposible: llevar el efecto túnel cuántico —un fenómeno que permite a las partículas atravesar barreras que deberían ser infranqueables— a una escala humana. En experimentos pioneros realizados en la Universidad de California, diseñaron circuitos superconductores capaces de mostrar ese extraño fenómeno cuántico en chips del tamaño de una mano. Al estudiar cómo los electrones atravesaban colectivamente una capa aislante, demostraron que lo cuántico también puede operar en lo visible. Su trabajo constituye la base de la computación cuántica moderna, con aplicaciones concretas en sensores, tecnologías de comunicación y algoritmos avanzados.

Devoret y Martinis han sido figuras clave en los desarrollos cuánticos de Google. Gracias a dichos avances, damos pasos hacia un campo unificador: al integrar las dimensiones del microcosmos, el macrocosmos y el humano, se impulsa una visión que aspira a ligar lo diminuto, lo inmenso y nuestro propio ser como partes de una realidad coherente y conjunta, una relación explorada también en la física moderna al recrear estados del universo temprano en laboratorio.

En Química, Susumu Kitagawa, Richard Robson y Omar Yaghi fueron premiados por crear materiales capaces de reinventar el espacio a escala molecular. Se trata de las estructuras metal-orgánicas (MOF), redes porosas con cavidades microscópicas que actúan como filtros, trampas o catalizadores. Estas “esponjas moleculares” ya se utilizan para capturar CO₂, liberar fármacos de forma controlada o extraer agua del aire. Uno de los galardonados, Omar Yaghi, creció en un campo de refugiados palestinos. Su historia es testimonio del papel igualador de la ciencia.

El Premio de Medicina o Fisiología distinguió a Mary Brunkow, Fred Ramsdell y Shimon Sakaguchi por descubrir un mecanismo esencial que impide que el sistema inmune ataque al propio cuerpo: las células T reguladoras. Estas células, junto con el gen FOXP3, son responsables de mantener el equilibrio inmunológico y prevenir enfermedades autoinmunes. Su hallazgo transformó nuestra comprensión del cuerpo como una comunidad biológica que necesita contención interna. La propia Brunkow, con una carrera breve pero contundente, representa una excepción poderosa en un sistema que suele premiar la cantidad por encima de la calidad.

En Literatura, el Nobel fue para el húngaro László Krasznahorkai, una voz exigente que se mueve entre lo espiritual y lo apocalíptico. Su escritura, densa y obsesiva, no busca consuelo ni claridad, sino una verdad profunda, escondida en la complejidad del lenguaje.

El Premio Nobel de la Paz reconoció a María Corina Machado, figura de la oposición venezolana, por su defensa de la vía institucional frente al autoritarismo. En un contexto de polarización, su elección responde a principios democráticos universales: el derecho a disentir, el poder de la persistencia civil y el rechazo a la violencia.

Finalmente, el Nobel de Economía fue compartido por Joel Mokyr, Philippe Aghion y Peter Howitt por sus contribuciones al entendimiento del crecimiento económico basado en la innovación. Mokyr, historiador económico, explicó por qué el crecimiento sostenido fue posible tras la Revolución Industrial: porque surgió una cultura que valoró el conocimiento científico y la curiosidad técnica. Aghion y Howitt desarrollaron la teoría de la destrucción creativa, que muestra cómo las nuevas tecnologías reemplazan a las viejas, generando progreso pero también resistencia. Su modelo subraya que, para sostener el crecimiento, es crucial gestionar los conflictos que surgen cuando el cambio amenaza intereses establecidos.

En todos los campos, los Nobel de este año apuntan en la misma dirección: el conocimiento no se construye por acumulación, sino por imaginación colectiva. No es un privilegio aislado, sino una forma de esperanza compartida.

Publicado en La Crónica de Hoy, 14 de octubre 2025.

El derecho a la salud al alcance de todos


El derecho a la salud al alcance de todos


 “El mayor bien es la salud; sin ella, todo lo demás pierde valor.”

A. Schopenhauer


El pasado 6 de octubre, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció la creación del Sistema de Salud Nacional, cuyo objetivo será transformar la manera en que las y los mexicanos acceden a la atención médica.

Este paso es fundamental, ya que, según la Organización Mundial de la Salud, garantizar el derecho humano a la salud sin discriminación implica asegurar las condiciones necesarias para que cada persona pueda desarrollar su vida con libertad y oportunidades. Sin salud no hay aprendizaje, no hay posibilidad de sostener un proyecto de vida ni de participar activamente en la sociedad. Proteger este derecho transforma realidades, rompe ciclos de exclusión y amplía horizontes. Además, constituye la base para el ejercicio efectivo de otros derechos, como la educación, el trabajo, la equidad y la justicia social.

De consolidarse, en 2027 el Sistema de Salud Nacional tendría como columna vertebral un registro único para cada ciudadano, lo que facilitaría la atención médica en cualquiera de las tres principales instituciones de salud pública del país: IMSS, ISSSTE e IMSS-Bienestar.

En términos generales, un sistema de salud universal ofrece varios beneficios clave, tanto a nivel individual como colectivo. En primer lugar, facilita el acceso a servicios preventivos, de tratamiento y de rehabilitación. Esto no solo mejora la salud de la población, sino que también reduce la propagación de enfermedades, contribuyendo a una mejor salud pública en general. La atención oportuna evita que

padecimientos menores se conviertan en problemas graves, mejorando así la calidad de vida y reduciendo la carga de enfermedad.

Otro beneficio fundamental es la protección financiera. Actualmente, muchas personas en México enfrentan barreras económicas para acceder a atención médica, lo que las obliga a endeudarse o vender bienes para cubrir los costos de un tratamiento. Este dato es especialmente relevante si se compara con países como Costa Rica, donde se garantiza la cobertura a toda la población y el gasto de bolsillo representa cerca del 22.4 % del gasto sanitario total. En México, esa proporción es mucho mayor, alcanzando el 38.8 %. Según el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), este gasto directo de las familias mexicanas está muy por encima de otros países del continente, como Colombia (13.6 %), Brasil (22.4 %) y Argentina (24.4 %). Si el sistema llega a materializarse, las y los mexicanos podrían recibir atención sin comprometer su estabilidad financiera ni caer en situaciones de pobreza por gastos médicos.

Una ventaja adicional de este sistema es la equidad en el acceso a los servicios de salud. En el pasado, las personas con menos recursos o aquellas no afiliadas a alguna institución pública han enfrentado grandes dificultades para acceder a atención médica. Con la implementación del nuevo sistema, todas las personas, independientemente de su nivel socioeconómico o afiliación, podrán recibir atención de calidad.

De igual manera, se buscaría garantizar una cobertura universal e igualitaria, acercando los servicios de salud a cada rincón del país. Esto representaría un avance significativo en la lucha contra las desigualdades sociales. Además, contribuiría al fortalecimiento económico de México: una población sana es más productiva y tiene mayor potencial para contribuir al desarrollo social y económico. La buena salud no solo reduce los costos médicos, sino que también fortalece la economía a largo plazo.

Si bien el sistema buscaría centrarse en atender los aspectos fundamentales de la salud pública, en un futuro cercano podría incorporar innovaciones clave, como consultas por telemedicina y la digitalización universal de expedientes médicos, lo que facilitaría un acceso más rápido y eficiente. También sería necesario adoptar un enfoque proactivo, con programas de prevención y educación sobre hábitos saludables.

En cuanto a la salud mental, se orientaría hacia una línea preventiva, educativa y personalizada, con un acompañamiento continuo que garantice el bienestar a largo plazo y con contacto humano. Además, sería fundamental desestigmatizar este tema y promover espacios seguros donde se normalice su tratamiento y concientización.

Sin duda, alcanzar esta meta representaría uno de los mayores logros del sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum y la consolidación del “Segundo Piso de la Transformación”. Acceder a un sistema de salud universal sólido, con financiamiento centralizado y acceso equitativo, no solo aliviaría la carga financiera de los hogares, sino que también representaría un avance sustancial en los indicadores nacionales de salud y en el fortalecimiento de la seguridad social. Este modelo traza un rumbo claro para México hacia una cobertura sanitaria justa, eficiente y sostenible.

Publicado en  El Universal, 9 de octubre 2025.

Los grandes retos en el futuro de México

Los grandes retos en el futuro de México


México se encuentra al inicio de una década decisiva, marcada por profundas transformaciones globales y desafíos estructurales. Cumplir con los Objetivos de la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2015 e implementada con el apoyo de todos los Estados miembros, obliga al país a enfrentar los efectos del cambio climático y consolidar un nuevo modelo económico basado en la innovación, la justicia social y la sostenibilidad ambiental.

Uno de los retos más apremiantes es acelerar la transición energética. El país necesita avanzar con mayor rapidez hacia fuentes limpias, modernizar su infraestructura productiva y adoptar tecnologías que permitan una reindustrialización con enfoque ambiental. En paralelo, será crucial fortalecer el Estado de derecho y garantizar condiciones estables para la inversión.

La economía mexicana también enfrenta signos de desaceleración en sectores estratégicos. Según el INEGI, la inversión pública cayó 22.4% en el primer trimestre de 2025, lo que ha limitado el impulso a obras de infraestructura y desarrollo regional. Este retroceso impacta directamente en la modernización del país y en la generación de empleo, especialmente en la industria de la construcción, que ha mostrado una disminución en la demanda de materiales y servicios.

Sectores clave como la minería y el transporte presentan señales de alerta. La inversión extranjera directa en minería se redujo 15% en 2024, según datos de la Secretaría de Economía, lo que afectó la competitividad y el crecimiento del sector. A su vez, la compra de vehículos pesados, vital para la renovación del aparato productivo, cayó 7.6% en el mismo año, reflejando una menor dinámica industrial.

En el plano internacional, México se encuentra en un entorno geopolítico en transformación. Como advierte el analista Fareed Zakaria, el poder global ya no está concentrado en una sola potencia, sino distribuido entre diversos actores.

El T-MEC coloca a México en una posición privilegiada dentro de América del Norte, y la tendencia global hacia la relocalización de cadenas productivas abre nuevas posibilidades de crecimiento. Sin embargo, el verdadero desafío será garantizar que los beneficios de esta reconfiguración económica no se limiten a las regiones del norte, sino que se distribuyan de manera equitativa en todo el país, promoviendo un desarrollo más equilibrado y sostenible.

Frente a estos desafíos, el nuevo gobierno ha iniciado su mandato con una agenda social sólida y con avances que marcan una diferencia en la vida cotidiana de millones de personas. El primer informe de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum se presentó en un contexto de respaldo legislativo amplio, un gabinete con perfil técnico y una base social robusta.

Entre los logros destacados se encuentra el proyecto de construcción de mil Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI) a cargo del IMSS. Esta iniciativa no solo ofrece espacios seguros para el desarrollo integral de niñas y niños, sino que también permite a muchas mujeres estudiar o trabajar sin cargar en soledad con las tareas de cuidado.

Otro avance significativo ha sido la consolidación de la pensión universal para personas adultas mayores, un derecho que no solo mejora las condiciones materiales de vida, sino que también ha contribuido a su revalorización social. En materia laboral, el aumento sostenido al salario mínimo ha tenido un impacto real en el poder adquisitivo de millones de trabajadoras y trabajadores, especialmente aquellos históricamente marginados del crecimiento económico.

De acuerdo con el INEGI, entre 2018 y 2024, 13.4 millones de personas salieron de la pobreza multidimensional en México, lo que representa una mejora sustancial en los indicadores de bienestar. Estos logros reflejan una apuesta por la justicia social como eje de la transformación nacional.

México enfrenta años complejos, pero también llenos de oportunidades. El reto será convertir las condiciones actuales en un punto de inflexión para consolidar un país más justo, próspero y sostenible para todas y todos.

Publicado en La Crónica de Hoy, 7 de octubre 2025.

El Agua: Principio Vital y Derecho Humano

 

El Agua: Principio Vital y Derecho Humano


«Tendremos un Registro Nacional de Agua, confiable y transparente, que nos ayude a evitar la corrupción.»

Efraín Morales, director general de CONAGUA

En la antigua Grecia, Tales de Mileto postuló como inicio del pensamiento filosófico que el agua es el principio de todas las cosas; el origen mismo de la vida y la sustancia primordial del universo. Para Heráclito, todo fluye, y el agua es símbolo perfecto del cambio constante. “No podemos bañarnos dos veces en el mismo río”, decía, “porque ni el río ni nosotros somos los mismos”.

En 1992, durante su mandato, Carlos Salinas de Gortari modificó la Ley de Aguas, lo que convirtió al preciado líquido en una mercancía. Las concesiones fueron entregadas sin control riguroso, como objeto transmisible y vendible entre particulares, lo cual propició prácticas de acaparamiento, desperdicio, uso con fines privados y desconocimiento sobre su explotación real. El resultado fue una profunda desigualdad en el acceso: mientras algunos gozaban de abundancia, otros sobrevivían con escasez, particularmente en el centro y norte del país.

La presidenta Claudia Sheinbaum ha sido enfática al afirmar: “El agua no es mercancía, es un derecho humano” y “el agua que no se usa, regresa al Estado”. Estos principios reflejan el núcleo de una transformación orientada a fortalecer la gestión del recurso hídrico, conforme lo establece la Constitución, con el objetivo de redistribuirlo bajo criterios de equidad, sostenibilidad y justicia social.

Efectivamente, la Carta Magna garantiza en su artículo 4º que “toda persona tiene derecho al acceso, disposición y saneamiento del agua para consumo personal y doméstico, de forma suficiente y salubre” y en el artículo 27 que “el agua es propiedad de la Nación”. No obstante, estas garantías legales se ven constantemente desafiadas por la sobreexplotación de acuíferos, la distribución inequitativa del recurso y el manejo ineficiente de las concesiones.

Frente a este panorama, y tras 12 años de incumplimiento, el Gobierno Federal ha impulsado una profunda reforma a la Ley de Aguas Nacionales y la expedición de una nueva Ley General de Aguas. Ambas surgen de un proceso amplio de consulta con la participación de representantes sociales, ambientales, empresariales y académicos, y buscan ratificar el agua en su carácter de derecho humano y bien común estratégico para la nación, por encima de cualquier interés económico.

Como eje rector se establece que el Estado mexicano será el único responsable de regular y garantizar el uso del agua como garante de la vida. Como parte del nuevo ordenamiento de las concesiones, ya no será posible transmitir títulos entre particulares. Toda solicitud de prórroga deberá pasar por un análisis riguroso de la autoridad del agua; se eliminarán los cambios arbitrarios de uso y se creará un nuevo Registro Nacional del Agua que dará certeza jurídica a todos los usuarios.

Se introducen sanciones más severas contra quienes sustraigan agua ilegalmente, perforen pozos sin autorización o reincidan en prácticas ilícitas, incorporando incluso la figura de extinción de dominio. Para combatir el robo del agua y el mercado negro, se crea un nuevo capítulo de delitos hídricos, que contempla diversas penas y multas por la explotación, extracción y traslado ilegal de aguas nacionales, actos de corrupción en el otorgamiento de títulos y el desvío ilegal de cauces naturales, los cuales serán perseguidos de oficio.

También se crea el Fondo de Reserva de Aguas Nacionales, donde toda el agua que se recupere será reasignada mediante planeación estratégica a corto, mediano y largo plazo, garantizando su abasto en zonas de alta marginación. Para evitar el acaparamiento, se establece que el pago de la cuota de garantía no podrá exceder cinco años. En términos de eficiencia, se fortalece la tecnificación del riego agrícola, los mecanismos para medir el uso del agua y regulaciones específicas sobre la captación pluvial.

El monitoreo en tiempo real de los cuerpos de agua permitirá prever demandas futuras y detectar irregularidades en su uso. Sistemas digitales de denuncia, como la app de Conagua, fomentarán la participación ciudadana en la vigilancia y protección del recurso. La apertura de datos también será clave: la ciudadanía podrá acceder a información sobre concesiones, niveles de acuíferos y empleo del agua, lo que promueve la transparencia y la corresponsabilidad.

Sin agua no hay vida. Que llegue con suficiencia al agricultor que la trabaja, a la industria que la transforma, a las comunidades que la necesitan y a la naturaleza que la sostiene. Gestionarla con visión, equidad y responsabilidad no es solo una tarea del presente, sino un compromiso con el futuro. Los aciertos y omisiones que tengamos hoy en su manejo los heredarán las siguientes generaciones.

Celebramos esta importante iniciativa de la presidenta Claudia Sheinbaum y hacemos propicio felicitarla en su primer año de Gobierno.


Publicado en El Universal, 2 de octubre 2025.

Seres sintientes: un deber de justicia y compasión

 

Seres sintientes: un deber de justicia y compasión




Cuando el Homo sapiens comenzó a habitar la Tierra, ya existían otros seres vivos: plantas, animales e insectos, quienes desempeñaban un papel fundamental en el equilibrio natural del planeta. Con el paso de los siglos, nuestra intervención ha sido indiscriminada: desde la sobreexplotación de los recursos naturales hasta la destrucción sistemática de ecosistemas enteros. De hecho, según el Fondo Mundial para la Naturaleza, entre 1970 y la fecha hemos perdido el 60% de las poblaciones de peces y el 70% de los insectos del planeta, dos de los grupos más importantes para la vida en la Tierra. Según la ONU, la humanidad también ha puesto a más de un millón de especies al borde de la extinción. Además, hemos intervenido en procesos vitales como la polinización, lo que ha tenido repercusiones devastadoras en la biodiversidad global.

En México, como en muchas otras naciones, el sufrimiento animal no solo es una realidad cotidiana, sino que también se encuentra legitimado en tradiciones culturales que, si bien tienen un arraigo histórico, ya no pueden ser vistas como justificación para la violencia. Es por esta razón que, en mi ejercicio como legislador, decidí presentar dos iniciativas clave para la defensa y protección de los animales. La primera de ellas fue la propuesta para prohibir las corridas de toros, un espectáculo que, a pesar de su tradición en algunas regiones, implica un sufrimiento indescriptible para los animales involucrados. Afortunadamente, este mismo año el Congreso de la CDMX aprobó una legislación que permite las “corridas sin violencia”, un avance hacia una visión más respetuosa con los animales, situación que también está por definirse en la SCJN gracias a juicios de amparo promovidos por colectivos defensores del bienestar animal.

La segunda iniciativa que presenté fue la modificación del Código Penal, para que el maltrato animal dejara de ser un delito perseguido únicamente por querella del tutor y pasara a ser considerado un delito de oficio, de modo que cualquier persona pueda formular la denuncia correspondiente. Con ello se crea un marco de protección real para todos los seres sintientes, incluyendo aquellos que viven en situación de calle o en cautiverio. También, junto con un grupo de legisladores, logramos que en la Ciudad de México se dejara de ver a los animales como cosas y se les reconociera como animales de compañía, seres sintientes y sujetos de trato digno y respetuoso: un paso crucial para cambiar la concepción de la relación entre humanos y animales. De manera adicional, pero no menos importante, conseguimos la prohibición del funcionamiento de los rastros clandestinos.

Este avance forma parte de una tendencia más amplia en muchos países, donde los animales comienzan a ser reconocidos como “sujetos no humanos de derechos”. En América Latina, por ejemplo, el concepto de “familias multiespecie” ya cuenta con jurisprudencia, lo que implica que los animales son considerados miembros activos y valiosos del núcleo familiar, con derechos y dignidad propia. Por su parte, el Parlamento Europeo ha aprobado un paquete legislativo que incluye la identificación obligatoria con microchip, la prohibición de venta de perros y gatos en tiendas, normas estrictas para criadores, requisitos básicos de bienestar y la futura creación de una lista positiva de especies permitidas.

Convencido de la urgencia de una nueva legislación en esta materia, celebro asistir hoy a la exposición fotográfica “Revocar el Silencio: Erradicar el Maltrato, la Crueldad y la Tortura Animal”, organizada por las senadoras de la República Anahí González y Celeste Ascencio, con el propósito de concientizar e impulsar una Ley General de Protección Animal que sea verdaderamente transformadora.



Publicado en La Crónica de Hoy, 30 de Septiembre 2025.

Reflexiones: Reunión Internacional para la Atención del Cáncer Infantil en las Américas

 

Reflexiones: Reunión Internacional para la Atención del Cáncer Infantil en las Américas


El día de ayer fue inaugurada la 1ª Reunión Internacional para la Atención del Cáncer Infantil en las Américas, un encuentro sin precedentes que reúne a especialistas de distintos países con un objetivo común: dar esperanza y una mejor atención a niñas y niños con cáncer. Además, este foro tiene el objetivo de revisar políticas públicas y procedimientos con expertos de 13 países del continente americano y de España.

El cáncer infantil es una de esas realidades que sacuden cualquier certeza. Tal como lo recordó la Dra. Paola Friedrich, directora para América latina de St. Jude Global, quien recordó ser sobreviviente de cáncer infantil e hija de sus padres que pasaron este proceso. Más que un foro médico, este encuentro representa una declaración de principios: el cáncer infantil no se enfrenta en soledad, sino con alianzas, ciencia compartida y, sobre todo, esperanza. Los números ayudan a dimensionar lo alcanzado.

En 2018, apenas 34% de los niños con cáncer atendidos en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) lograban superar la enfermedad. Hoy, esa cifra es de 84%, un estándar comparable con países de primer mundo. La clave ha sido la creación de 36 Centros de Referencia Estatal para la Atención del Niño con Cáncer (OncoCREAN), espacios distribuidos en todo el país que permiten que los menores reciban tratamiento en sus estados de origen, sin necesidad de trasladarse a grandes ciudades.

Esto no sólo acerca la medicina especializada, también evita el desarraigo y reduce el sufrimiento de familias que antes debían viajar cientos de kilómetros para salvar a sus hijos.

Anteriormente, la expectativa de vida de un paciente dependía en gran medida del “código postal”, es decir, de la región donde fuera diagnosticado. Hoy, con la homologación de protocolos, la incorporación de medicamentos de vanguardia y la descentralización de los servicios, cada paciente recibe la misma calidad de atención. Se acabó la lógica de que había estados con mayores posibilidades de salvar a los menores, porque ahora el modelo asegura equidad: mismas terapias, mismos procedimientos y mismos medicamentos para todos. En lo que va de este año, 440 niñas, niños y adolescentes concluyeron exitosamente su tratamiento contra el cáncer, un logro que calificó como único en la historia de la atención oncológica pediátrica en México. Actualmente, el cáncer es la segunda causa de muerte en infantes de 2 a 14 años en el país.

El Mtro. Zoé Robledo destacó en el evento que el IMSS atiende el 45% del total niñas y niños con cáncer en México. Por ello, es de suma relevancia que se siga fortaleciendo el programa OncoCREAN para que pueda salvar más vidas. Tal como lo expresó la Dra. Alva Santos, la medicina de precisión permite dar el medicamento necesario para el tipo de tumor que tiene el paciente.

La lucha contra el cáncer infantil nos recuerda que la medicina no sólo se mide en cifras, sino en los rostros de quienes vuelven a sonreír y logran tocar la campana al momento de que los dan de alta, luego de haberse curado. Este encuentro internacional es, ante todo, un recordatorio de que salvar una vida infantil no es un acto aislado: es un compromiso colectivo que une ciencia, empatía y esperanza. Porque cuando un niño vence al cáncer, gana también toda la humanidad.


Publicado en El Universal, 25 de septiembre 2025.

Epidemias y pandemias

 

Epidemias y pandemias



Las epidemias y pandemias han marcado la historia de la humanidad, afectando la cultura, la política, la economía y la moral colectiva. Mientras las epidemias son brotes localizados de enfermedades, las pandemias tienen un alcance global y afectan a millones de personas.

Estos eventos han transformado nuestra comprensión de la existencia humana.

Una de las primeras epidemias documentadas fue la de Atenas, en el año 430 a. C., durante la Guerra del Peloponeso. Una enfermedad desconocida acabó con un tercio de la población, incluidos líderes militares como Pericles. Este brote no solo diezmó a la población, sino que también simbolizó la crisis de fe y el colapso de las instituciones de la época. El filósofo Sócrates reflexionó entonces sobre la fragilidad humana, ofreciendo una visión que desafió las creencias establecidas.

En el siglo VI, el Imperio Bizantino enfrentó la Plaga de Justiniano, un brote de peste bubónica que mató a entre 25 y 50 millones de personas. La crisis de fe y el colapso del orden social marcaron profundamente la vida del imperio. Durante esta pandemia, la vida cotidiana se trastocó y la cultura bizantina se vio desbordada.

El cólera también ha sido protagonista en la historia. En el siglo XIX, un brote afectó gravemente a Venecia. La novela Muerte en Venecia de Thomas Mann toma como referencia esta enfermedad y la convierte en metáfora de la decadencia y el declive. Refleja no solo el impacto físico de la epidemia, sino también el caos social y el temor a lo inevitable. En la obra, el cólera simboliza el fin de una era tanto para la ciudad como para los individuos.

Las pandemias también han sido objeto de reflexión filosófica, como en La peste de Albert Camus. El autor, ganador del Premio Nobel, utiliza el brote de una enfermedad como metáfora de la fragilidad humana. Camus nos recuerda que las pandemias no solo afectan la salud, sino que también ponen al descubierto las debilidades de la sociedad y la inevitabilidad de la muerte.

La gripe española de 1918 afectó a casi 50 millones de personas, especialmente jóvenes y adultos saludables. Su rápida propagación entre las tropas de la Primera Guerra Mundial mostró cómo una enfermedad puede desbordar a las sociedades modernas. A pesar de los avances médicos, la respuesta gubernamental fue lenta, lo que agravó la crisis.

En tiempos recientes, el VIH/SIDA, que surgió en 1981, ha causado la muerte de más de 35 millones de personas. A pesar de los avances en el tratamiento, sigue siendo una pandemia global que impacta profundamente la salud pública, la sociedad y la economía, además de perpetuar el estigma hacia las personas afectadas.

La pandemia de COVID-19, que comenzó en 2019, reveló las debilidades de los sistemas de salud en todo el mundo. Esta experiencia subraya la importancia de la vigilancia constante y de la cooperación internacional en la lucha contra las pandemias. En 2025, por ejemplo, en México se han emitido avisos epidemiológicos nacionales relacionados con enfermedades como sarampión, tos ferina y miasis (una infección causada por la larva de la mosca Cochliomya hominivorax). A nivel mundial, la OMS ha emitido alertas sobre padecimientos como el chikungunya, la fiebre amarilla, la influenza aviar y el sarampión, entre otros. Esto demuestra lo interconectada que está la salud mundial y la necesidad de mantenerse alerta y preparados.

En este contexto, ayer participamos en el Foro Nacional de Vigilancia Epidemiológica e Información y Análisis en Salud, celebrado en Atlixco, Puebla y auspiciado por el IMSS. Este foro se centró en el fortalecimiento de las capacidades técnicas y operativas, mediante la actualización en herramientas de vigilancia epidemiológica, un área en la que el Instituto sigue siendo clave en la implementación de políticas de prevención y atención.

La vacunación continúa siendo una herramienta esencial para prevenir brotes de enfermedades y proteger a las poblaciones más vulnerables. Actualmente, el sarampión representa una amenaza en nuestro país, por lo que instamos a la población a acudir a su Centro de Salud más cercano para recibir la vacuna y garantizar así su protección y la de la comunidad.


Publicado en La Crónica de Hoy, 23 de septiembre 2025.