Por el gran interés que reviste este documento, quiero reproducir en mi blog el discurso que pronunció Antonio Gerard y Zubia en el Hemiciclo a Juárez el 18 de julio de 2001 en representación de la Muy Respetable Gran Logia del Valle de México, con motivo de la Ceremonia Conmemorativa del 129 Aniversario Luctuoso de Nuestro Venerable Hermano Benito Juárez, cuando el que suscribe fue Muy Respetable Gran Maestro.
Asimismo, años después llega a mí un segundo documento que reproduzco literalmente y les comparto; un análisis en la actualidad sobre este discurso, a casi 10 años de haber sido pronunciado.
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DISCURSO DEL 18 DE JULIO DE 2001.
Ardua es la tarea que me encomienda la M.R.G.L. Valle de México y doy las gracias, porque es una oportunidad que nunca deben dejar los masones de expresar al pueblo lo que puede oír de ella.
Ya que la masonería es el sustento del progreso, pero no de ese progreso de construir por construir sin importar el daño que causa a sus semejantes, sino el construir en base a la educación sustentándola en la armonía y la razón para el progreso individual, familiar, colectivo, nacional y universal.
Sin embargo, mi espíritu no vacila para que se manifieste la voz de la mesura y la verdad, que las más de las veces, éstas se encuentran envueltas en tímidos velos de una prudencia exagerada o bien en los sutiles velos de las pasiones que destruyen a la humanidad como la ignorancia y la soberbia de sentirnos dioses, o la ambición de querer ser lo que no somos y perder la realidad de lo que somos y para que quede claro, a los masones no se les puede comprar, porque ellos saben reconocer la ignorancia, la hipocresía y la ambición.
Hablar de lo que nos relata la historia es fácil, pero llegar a descubrir las intenciones que motivaron a nuestro H. Juárez es otra cosa; sin embargo, en un día como hoy, 18 de julio de 1872, se daba la noticia para algunos, funesta, de la muerte de Benito Juárez, presidente de nuestra amada patria; me he atrevido a mencionar funesta para algunos, porque para nuestro hermano Juárez no era más que un paso a cumplir –esa ley inexorable de que todo aquello que nace tiene que morir, pero para él –la muerte no significaba nada, ya que como masón tenía fe en que la muerte no es más que un nuevo nacimiento para otros planos.
“Quién me diera alas con el ímpetu del terror y del pensamiento para atravesar la noche que se tiende ante mí, quién me diera alas para supervolar la laguna de negros y espanto que me separa de la nueva aurora.”
¡Porque sé que brillará la aurora, pero qué inenarrables horrores veo que se erizan en los caminos de la noche! Y qué pavorosa pesadilla habré de vivir antes de que amanezca –que aún cuando en mi prevalece el espíritu, la carne que me acompaña es cobarde y ruin.
¡Quién me diera alas para remontarme al infinito y desde ahí vencer la cobardía y gritar no como plañidera, sino con la voz del hombre de conciencia que ama a su país y a sus hermanos sin distinción de clases o de etnias, sino sólo como mexicanos y poderles señalar a nuestros gobernantes el camino a seguir sirviendo a nuestro pueblo como una gran familia y no servirse de él para fines personales.
Hace algunos años afirmábamos que las normas o leyes que nos rigen plasmadas en nuestra Constitución, eran los exquisitos aromas que habían emanado de los trabajos realizados en nuestras logias con el espíritu de la masonería que es universal y ha servido a grandes estadistas y a otros muchos ignorados, a buscar para nuestro país una realidad de justicia y armonía, que aún ahora nos perfuma y eso se fortaleció con la presencia de Benito Juárez, no aquél al que invocan como santo para que remedie lo que nuestra cobardía no es capaz de enfrentar y vencer, sino sólo el hombre que cumplió con su misión o encomienda que le había sido dada y aprovechó la oportunidad de servir al G.A.D.U., sirviendo a su patria.
Y ahora me pregunto, ¿qué es lo que festejan, que se murió? ¿lo que fue? ¿lo que hizo? ¿lo que legó o lo que mostró?
¿Qué es lo que festejan? Probablemente sólo es un ejemplo de un ser que quiso ser hombre y nos mostró a sus hermanos que cuando la intención de una acción tiene luz, no importa lo más oscuro del camino, para los débiles fue un héroe, ya que siempre se le busca para remedio de sus males, para los masones, un hombre que tuvo fe, esperanza y caridad para sus hermanos, que son la humanidad entera.
Y lo más importante es que aquellos individuos que le lloran o le recuerdan o aquellos individuos que lo quieren imitar, es sólo que su ejemplo pueda servir no para hacer héroes sino hombres que sepan luchar por la justicia y es por eso que los masones deben intentar llegar a esa altura de hombre, reconociendo sus deberes y utilizando todas sus herramientas para lograr la justicia: individual, social y mundial, y por eso su lema: “del respeto al derecho ajeno, es la paz.”
Aquellos individuos que festejan que murió, es por temor a la verdad.
Aquellos individuos que festejan por lo que fue, tengan el valor de intentar llegar a ese mismo sitio.
Aquellos individuos que festejan por lo que hizo, ya que lo que hizo fue solo por mostrar la “justicia y la razón.”
Porque él, no lucho contra las religiones y en especial la religión de nuestro país; al contrario, solo hizo que se respetara lo que nuestro hermano Julio César dijo:
“Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.” Que sólo es la lucha por la justicia en base a la razón y al respeto, a la creencia de cada uno.
Lo que legó fue el ejemplo de un hombre.
Por todo lo anterior, muchos individuos de nuestra nación han querido usar su imagen no para el progreso sino sólo para justificar sus pasiones e intereses personales.
Para la masonería, como dije, es un hombre más, como los que ha habido y por los que tenemos patria – y para los honorables hermanos de hoy, recordar que debemos ser los hombres sabios para imitar o mejorar sus enseñanzas para continuar en el progreso; para los que vienen, será no sólo él ya el ejemplo, sino todos los masones que sean dignos de llamarse así.
Con el ejemplo de todos los verdaderos masones, se puede llegar al progreso, porque ellos están seguros que sólo son criaturas del G.A.D.U. y tienen sólo una encomienda, que es: “el triunfo de la luz sobre las tinieblas.”
Más esto no es para ellos simples palabras sino verdades tomadas de la conciencia universal para el progreso del humano y a través de la evolución llegar a convertirse en hombres.
A los masones se les ha adjudicado una serie de falsos conceptos, unos hasta peyorativos, más esto no incomoda a los hermanos porque a pesar de todo respetan toda creencia, ya sea filosófica, religiosa o política. Porque ellos no creen, más al contrario, saben que toda acción con sustento en una intención de luz, siempre progresará y seguirá adelante a pesar de todos los obstáculos que existan, porque en un pueblo con educación no importan los conceptos filosóficos, religiosos o políticos que se les quieran imponer, “jamás la imposición estará sobre la razón.”
A nuestro hermano Juárez le deseamos que descanse en paz y siga su camino y que sus enseñanzas sirvan de estímulo y no sean olvidadas, a nuestros hermanos de cualquier grupo religioso, filosófico o político les deseamos que la paz sea en vuestras mentes y la caridad en vuestros corazones, para que algún día, llegue a reinar la armonía en cada uno de vosotros, así como en nuestro país, para que exista y sea una realidad “una humanidad con luz.”
Antonio Gerard y Zubia.
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ANÁLISIS DEL DISCURSO 2010.
El diálogo de Juárez y un masón
En el discurso que me pidió el entonces Muy Respetable Gran Maestro Jorge Gaviño Ambriz, que participara representando a la Gran Logia Valle de México, con motivo de la ceremonia conmemorativa del 129 aniversario luctuoso de nuestro venerable hermano Benito Juárez García en el Hemiciclo a Juárez, el 18 de julio de 2001, me permití exponer algunos conceptos que quizá no fueron entendidos con la intención que yo los maneje, por cierto que al lado de la tribuna especial para los Dignatarios del Gobierno del D.F. y de los representantes de la Gran Logia Valle de México, venerable hermano Jorge Gaviño Ambriz y Julian Gascón Mercado; comendador del Supremo Consejo de México, los partidos políticos en sus diferentes representaciones, así como el pueblo masónico y los ciudadanos mexicanos, se encontraba un micrófono que spolo debería servir para el maestro de ceremonias y, sin embargo, los tres oradores que me antecedieron fueron siempre al micrófono del maestro de ceremonia cuando el micrófono para los oradores se encontraba enfrente del público en la parte que están los Leones y las Águilas, y cuando me dirigía a ese sitio, oí un comentario. “ya se equivocó el viejito”.
Mi discurso tenía un objetivo muy especial que era que tanto mi hermano Benito Juárez, así como mis honorables hermano masones tuvieran una reflexión muy especial y por eso ahora he aceptado realizar este diálogo.
En el final de ese discurso me dirijo a nuestro hermano Juárez deseándole: “Que descanse en paz y que siga su camino, me hubiera gustado que algunos de mis H.H. me preguntaran el por qué de esas frases, sin embargo, sólo hubo silencio.
Mis queridos H.H. por un momento concédanme la posibilidad de que nuestro hermano esté detenido en el camino de su evolución y por qué no ha podido seguir su camino. La pregunta obvia que es: ¿lo que ha obligado a nuestro hermano a permanecer en ese estado?”
Parecería que me salgo del tema, pero me voy a permitir hacer tres reflexiones o preguntas que espero las hagan suyas:
1. ¿Cada uno de ustedes han tenido conciencia de todo lo que han hecho en esta vida?
2. ¿Han sabido los motivos que tuvieron para hacer las cosas que han hecho?
3. ¿Sabían el resultado de lo que hacían o hicieron y de lo que dejaron de hacer?
Si estas mismas preguntas se las hago hoy a nuestro hermano Juárez, no para juzgarlo sino para que él me las conteste o se las conteste a él mismo y así quizás, él se explicaría muchas cosas del porqué las hizo y quizás también por qué algunas las dejó de hacer y qué fue lo que lo obligo a ello.
Juárez solo vivió como todos nosotros su presente y no lo hizo por la Historia y como todo Ser su conciencia era y es limitada.
Sin juzgar su vida me pregunto: ¿Cuál es su respuesta a esas preguntas anteriores? ¿y si Nuestro Hermano Juárez tuvo conciencia de todo lo que hizo en su vida? ¿Sabe o supo los motivos que tuvo para las cosas que hizo? ¿Sabe o supo el resultado de lo que hizo y de las que dejó de hacer y la realidad de sus consecuencias?
La población aproximada en la actualidad es que somos algo así como 110 millones de ciudadanos y cuántos de esos compatriotas se manifiestan como juaristas para exaltar a Juárez, y cuántos de esos se han acercado a él para seguir su ejemplo, cuántos han usado su pobreza de cuna para exaltar sus pasiones y decir que todos los “indígenas” son como Juárez; sin embargo, Juárez manifiesta su opinión en un párrafo de esa famosa carta en la que le contesta a nuestro hermano Don Matías Romero: Si la Francia, los Estados Unidos o cualquier otra nación se apodera de algún punto de nuestro territorio y por nuestra debilidad no podemos arrojarlo de él, dejemos siquiera vivos nuestros derechos para que las generaciones que nos sucedan lo recobren. Malo sería dejarnos desarmar por una fuerza superior, pero sería pésimo desarmar a nuestros hijos privándolos de un buen derecho, que más valientes, más patriotas y sufridos que nosotros lo harán valer y sabrán reivindicarlo algún día.
En otra parte de esta misma Carta manifiesta una sensibilidad o quizás una facultad de intuir la muerte de su hijo al que más amaba y que nuestro hermano Matías Romero aún no se lo decía.
A nuestro hermano Juárez habría que decirle: gracias porque en tu tiempo hiciste lo que consideraste justo, ahora es justo que consideres que ya es tiempo de seguir tu camino y tu evolución, que ya no sigas haciendo daño, porque después de tantos juaristas nuestro país sigue igual o peos. Quizás es un insulto para la masonería, que sólo un hombre siga dirigiendo a nuestro país después de tantos años, si Dios nos juzgara por lo que dicen que hicimos todos ya estaríamos en el cielo.
Le pregunto a mi hermano Juárez: ¿si tomaras conciencia de lo que te ha impedido continuar avanzando en el camino de tu evolución? Y me pregunto: cuáles son o fueron las causas que te impidieron ese avance: voy a mencionar algunas de esas posibilidades.
1. ¿Acaso te mataron? ¿Qué cosa extraña quiso quitarte la vida si hacías tanto bien al país? ¿Por qué tenemos el acta de defunción tuya y ahí hay muchas dudas; por qué no murió como dicen, en el Palacio Nacional? ¿Por qué te mataron? ¿Para qué te mataron? ¿Quién ganaría con tu muerte?
2. ¿No cumpliste con lo que te prometiste a ti, a tu familia, a tu pueblo, a tu nación?
3. ¿Por qué continúas esperando que algún hermano haga algo más de lo que tú hiciste o dejaste de hacer y sólo oyes llantos y lamentos de seres que se dicen hombres?
4. O si tú necesitas para seguir tu evolución dejas “las llaves” a algún hermano que se comprometa a ser hombre a continuar lo que tú no pudiste terminar? Pero sólo oyes a niños lamentarse de su suerte.
Y por qué no te juzgamos también por lo que dejaste de hacer, por qué no dicen mis H.H. mínimo hagamos lo que Juárez: respeten el derecho de todos los hombres sus hermanos. Y esto quizá le servirá a Juárez para no ser ya santificado por los cobardes que quieren usarlo para ocultar su miedo a enfrentar la realidad de lo que es ahora nuestro país. Si muchos quieren usar la pobreza de su cuna, la pobreza está en una escala mayor, y también ayudarías a dejar de llorar a todos los cobardes que no hacen nada para cumplir como hombres. Y le pregunto a mi hermano Juárez: ¿fue tu cuna humilde lo que hizo que lograras ser hombre? ¿Fue la pobreza? Porque la pobreza de hoy va más allá que la de aquella época. También, ¿ha fallado para hacer más hombres? ¿Fue tu estudio? Porque ahora hay más universidades y el país sigue igual. ¿Por qué todo lo que te ayudó no ha ayudado a más gente en la actualidad? Por eso les digo: te exaltan por poco y no quiero que piensen que soslayo lo que hiciste, pero si mi hermano Juárez, siguieras el camino de la evolución, cuántos otros hermanos encarnados, desencarnados y de la Logia Blanca también seguirían su camino y nuestro país empezaría a ver ese rayo de luz que alumbraría a todo nuestro pueblo.
Podríamos preguntarle a La Institución Masónica: ¿Por qué sólo nos diste un “hombre” con el compromiso para servir a sus hermanos?
Y me pregunto: ¿Qué es lo que pasa, que ningún hermano desea emular a Juárez? ¿Por qué si la masonería es la verdad, no le ha dado la oportunidad a otro “hombre” para que venga a salvar a sus hermanos de la oscuridad? ¿O es acaso que todas esas muestras de admiración manifestadas por los Hermanos, son sólo para relucir la cobardía de ellos por no poder seguir los pasos de ese “gran hombre”? ¿O sólo siendo Presidente se pueden arreglar las· cosas? Entonces por qué todos los Presidentes han fallado si quieren una América Unida y, sin embargo nos odiamos tanto entre los americanos?
¿Por qué en lugar de unirnos, hay tanto odio y ambición entre todos los partidos? Y si recordamos que partido es eso solo: parte y lo que necesitamos nosotros es la unión de todo nuestro pueblo que se sienta orgulloso de decir "SOY MEXICANO". Antes que PRI, PRD. PAN. P. T Etc. Etc.
Por último, todo esto solo es para invitar a nuestro hermano Juárez a que reflexione y quizás nos haga dar su opinión sobre él, por qué está detenido en seguir el camino de la evolución e invitarlo a que, por amor a nuestro pueblo, con su ejemplo libere a muchos millones de mexicanos y llegar a ser lo que debemos ser para nuestra Amada Patria.
¿Cuántos de nosotros, los que nos ostentamos como masones, aceptaríamos como HOMBRES recibir esas LLA VES, para continuar con la obra que nuestro hermano Juárez no pudo terminar y que sigue esperando que algún hermano pueda continuar su obra para entregar esas LLA VES? ¿Hay algún hermano que, como soldado de la Luz, que sabe que, al ser soldado lógicamente, Ie van a disparar, y aún así aceptaría arriesgar su vida como nuestro Hermano?
Una última pregunta: ¿quiénes ganaron con su muerte, Francia, Estados Unidos, Inglaterra, La Iglesia, cual de todas ellas tendrían ese interés y qué obtuvieron con ello?
Entonces, yo diría: "MUERA EL FANTASMA DE JUÁREZ" Y VIVA JUÁREZ LIBERADO POR NOSOTROS AL ACEPTAR QUE, CON SU EJEMPLO, NOS INDUCIRÍA A BUSCAR LA VERDADERA LIBERTAD PARA DECIR "VIVA MÉXICO", LIBRE Y SOBERANO.
Por tofo lo anterior, también invito a todos mis hermanos encarnados y desencarnados, así como también a mis hermanos de la Logia Blanca, a ayudar a nuestro hermano Juárez a tener el valor y la fuerza para emprender ese camino de su evolución. Si él no tiene la suficiente fuerza que nosotros unidos podamos ofrecérsela para que no sólo él, sino todos los hermanos podamos decir: G.A.D.U. , como en el triangular que se nos presenta en el cuarto de reflexiones: “que se haga tu voluntad y que nosotros cumplamos con nuestros deberes para contigo, para con nosotros mismos y todos nuestros semejantes, muy especialmente para nuestra patria amada”.
Si la meta de la masonería es buscar la VERDAD; si en lugar de glorificar o satanizar a nuestros hermanos que nos han antecedido, ¿por qué no dejamos de llorar a esos GRANDES HOMBRES COMO JUÁREZ Y TRATAMOS DE ALCANZAR Y LLEGAR, PRECISAMENTE, A SER HOMBRES PARA SERVIR A LA INSTITUCIÓN, A LA MASONERÍA, A NUESTRA NACION Y EN PARTICULAR, A CADA UNO DE NOSOTROS AL LOGRAR EL VERDADERO ESTUDIO DE LA· FILOSOFÍA, EN PARTICULAR DE LA MORAL PARA ALCANZAR LA VIRTUD Y VENCER AL VICIO.
"VIRTUD: AUSENCIA DEL ALMA " "VICIO AUSENCIA DEL ESPÍRITU"
QUE LA PAZ DEL G. A. D. U. SEA EN VUESTRAS MENTES Y LA CARlDAD EN VUESTROS CORAZONES.
Antonio Gerard y Zubia.
PAST. GRAN MAESTRO.
Mexico D. F. a 11 de Abril del 2010.
RESP. *. Logia Simbólica "SEGUIDORES DE LA RAZON # 301”.