Cuando un delito
queda impune se repite
Anónimo
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La falsificación de obras de arte es desafortunadamente una práctica común tanto a nivel mundial como nacional, debido a que es una actividad altamente lucrativa y que en la mayoría de las ocasiones la imitación de las piezas artísticas queda totalmente impune. Es considerada la tercer actividad más fructífera, después del narcotráfico y la venta de armas según indica, Angélica Abelleyra, quien realiza periodismo cultural desde hace 30 años.
Especialistas aseguran que la imitación de los trabajos como pinturas, esculturas y otras piezas es más sencilla cuando el artista que supuestamente realizó es famoso, pero su obra en sí, es poco conocida en su conjunto, lo que hace que el delincuente de arte engañe al comprador de manera sencilla obteniendo grandes ganancias.
A pesar de que los dueños de galerías de arte y especialistas recomiendan a quienes buscan adquirir una pieza artística asesorarse previamente para conocer si la obra es auténtica, los delincuentes quienes también son grandes conocedores de arte y extraordinarios artistas logran realizar un trabajos de imitación impecable que es casi imperceptible poder identificar las piezas falsas.
La falta de legislación y el endurecimiento de penas para las mafias hacen que el artista quede en un estado de indefensión, por lo que resultaría factible que los mismos maestros con el apoyo de reconocidas galerías de arte realizaran un catálogo en donde se registraran sus obras y así poder identificar quien es el autor y la procedencia del artículo.
A través del arte se expresan ideas, emociones, percepciones y sensaciones, por lo que se debe pagar un precio justo al verdadero autor.
Especialistas aseguran que la imitación de los trabajos como pinturas, esculturas y otras piezas es más sencilla cuando el artista que supuestamente realizó es famoso, pero su obra en sí, es poco conocida en su conjunto, lo que hace que el delincuente de arte engañe al comprador de manera sencilla obteniendo grandes ganancias.
A pesar de que los dueños de galerías de arte y especialistas recomiendan a quienes buscan adquirir una pieza artística asesorarse previamente para conocer si la obra es auténtica, los delincuentes quienes también son grandes conocedores de arte y extraordinarios artistas logran realizar un trabajos de imitación impecable que es casi imperceptible poder identificar las piezas falsas.
La falta de legislación y el endurecimiento de penas para las mafias hacen que el artista quede en un estado de indefensión, por lo que resultaría factible que los mismos maestros con el apoyo de reconocidas galerías de arte realizaran un catálogo en donde se registraran sus obras y así poder identificar quien es el autor y la procedencia del artículo.
A través del arte se expresan ideas, emociones, percepciones y sensaciones, por lo que se debe pagar un precio justo al verdadero autor.
@jorgegavino
(Publicado en La Crónica de Hoy el 27 de diciembre de 2014)
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